martes, septiembre 01, 2009

Año uno


Del humor de la Generación Apatow, Año uno toma de entre lo más accesorio, el chiste de índole sexual y explícita que sólo de tanto en tanto logra alguna línea perdurable; Harold Ramis, decidido a la comedia abiertamente intempestiva y al juego de la imprecisión histórica, queda bien lejos de sus jugadas más certeras, aquellas que implicaban a individuos psicológicamente torturados y desbordados por rutinas contemporáneas (Atrapado en el tiempo, Una terapia peligrosa). Bien al contrario, la sensación aquí es de suma poco armonizada, de sucesión desigual de gags más o menos afortunados, durante la primera mitad, y de evidente agotamiento de la inventiva (y de su trama), cuando afrontamos la segunda ya en la ciudad de Sodoma (...) La película de Harold Ramis es, sencillamente, incapaz de asumir la irreverencia desde el mismo corazón su narrativa, de rebelarse contra algo más allá de las buenas formas (ni siquiera la ingestión del excremento, tan deudora de John Waters, consigue que lo olvidemos.

Leer crítica completa en La Butaca

1 comentario:

Hormiga roja dijo...

Si estas interesado en el seguimiento del documental "Vivir de Pie. Las guerras de Cipriano Mera", que se estrenará a mediados de noviembre de este año, visítanos:
www.vivirdepie-lasguerrasdeciprianomera.blogspot.com

Muchas gracias!